EX CANDIDATO Y PRESIDENTE DE TOCOPILLA VUELVE, SEÑALÓ QUE LA SUPUESTA ALZA DE IMPUESTOS A LAS GRANDES EMPRESAS NO ES TAL Y QUE SE SIGUE PERJUDICANDO A LAS REGIONES CON LOS RECORTES DE PRESUPUESTOS.
Fernando San Román, presidente del Movimiento Tocopilla Vuelve, señaló compartir la opinión del diputado radical Marcos Espinosa, en cuanto a que el gobierno "nos está pasando gato por liebre" con la llamada alza de impuestos a las empresas.
A través del diario local, este martes 4 de mayo, el parlamentario por nuestra zona dijo que el alza de impuestos (a las utilidades, de 17 a 20 % en 2011, vuelve a 18,5% en 2012 y a 17% nuevamente el 2013) propuesta por Piñera a las empresas "se anula", ya que "en realidad se trata de un financiamiento neutro, ya que de acuerdo a la ley, dicho impuesto es sólo una retención y crédito".
Esto, explicó Espinosa, porque según el denominado pago provisional mensual (PPM), el impuesto ingresa por algunos meses a las arcas fiscales, pero luego se descuenta cuando los socios de la empresa en cuestión pagan el Impuesto Global Complementario. Es decir, si no se aumenta dicho Impuesto Global Complementario, simplemente no hay aumento de impuestos.
"Hemos estudiado con detención la propuesta del gobierno y hemos llegado a la misma conclusión que el diputado Espinosa. Acá no hay un alza verdadera y efectiva de los impuestos, acá hay un maquillaje, una propuesta que suena bonita, pero que no permite asegurar recursos para el estado y la reconstrucción", señaló San Román.
Según el ex candidato a diputado tocopillano, él y su movimiento han estudiado los análisis del economista Julián Alcayaga, lo que les permite hablar con argumentos y conocimiento de causa del tema.
"El proyecto aumenta de 17 a 20% el Impuesto de Primera Categoría que afecta a las empresas, pero hay un pequeño detalle: este impuesto es a la vez un crédito del impuesto personal del o los empresarios dueños de la empresa, y en los hechos no se produce un aumento de la recaudación tributaria, porque lo que el Fisco recibe de las empresas, lo tiene que devolver a los dueños de las empresas", indicó Fernando.
"Julián Alcayaga explica con un ejemplo que si una empresa que tiene utilidades por $ 1.000, paga actualmente $ 170 de Impuesto de Primera Categoría (17%), y con la reforma de Piñera ese impuesto aumenta a $ 200 (20%); pero al mismo tiempo, él o los empresarios dueños de esta empresa, al hacer sus declaraciones personales de impuestos (Global Complementario o Adicional), la devolución de impuesto también aumenta de $ 170 a $ 200, por lo cual la recaudación tributaria del Fisco no aumenta en nada", agrega.
Fernando San Román lamentó que el gobierno pretenda "engañar" a la gente con estos anuncios, ya que al no recaudar mayores impuestos se sigue perjudicando a las regiones con recortes presupuestarios para financiar la reconstrucción luego del terremoto del 27 de febrero en el sur de Chile.
"La Concertación no tuvo el coraje, en 20 años, de realizar una reforma tributaria para que las empresas que más ganan paguen más. Raro hubiera sido que la derecha, a pesar del desastre del terremoto, se hubiera atrevido a tocar las utilidades de estos grandes grupos económicos. Es lamentable cómo tratan de meterle el dedo en la boca a la gente", concluyó.
Fernando San Román, presidente del Movimiento Tocopilla Vuelve, señaló compartir la opinión del diputado radical Marcos Espinosa, en cuanto a que el gobierno "nos está pasando gato por liebre" con la llamada alza de impuestos a las empresas.A través del diario local, este martes 4 de mayo, el parlamentario por nuestra zona dijo que el alza de impuestos (a las utilidades, de 17 a 20 % en 2011, vuelve a 18,5% en 2012 y a 17% nuevamente el 2013) propuesta por Piñera a las empresas "se anula", ya que "en realidad se trata de un financiamiento neutro, ya que de acuerdo a la ley, dicho impuesto es sólo una retención y crédito".
Esto, explicó Espinosa, porque según el denominado pago provisional mensual (PPM), el impuesto ingresa por algunos meses a las arcas fiscales, pero luego se descuenta cuando los socios de la empresa en cuestión pagan el Impuesto Global Complementario. Es decir, si no se aumenta dicho Impuesto Global Complementario, simplemente no hay aumento de impuestos.
"Hemos estudiado con detención la propuesta del gobierno y hemos llegado a la misma conclusión que el diputado Espinosa. Acá no hay un alza verdadera y efectiva de los impuestos, acá hay un maquillaje, una propuesta que suena bonita, pero que no permite asegurar recursos para el estado y la reconstrucción", señaló San Román.
Según el ex candidato a diputado tocopillano, él y su movimiento han estudiado los análisis del economista Julián Alcayaga, lo que les permite hablar con argumentos y conocimiento de causa del tema.
"El proyecto aumenta de 17 a 20% el Impuesto de Primera Categoría que afecta a las empresas, pero hay un pequeño detalle: este impuesto es a la vez un crédito del impuesto personal del o los empresarios dueños de la empresa, y en los hechos no se produce un aumento de la recaudación tributaria, porque lo que el Fisco recibe de las empresas, lo tiene que devolver a los dueños de las empresas", indicó Fernando.
"Julián Alcayaga explica con un ejemplo que si una empresa que tiene utilidades por $ 1.000, paga actualmente $ 170 de Impuesto de Primera Categoría (17%), y con la reforma de Piñera ese impuesto aumenta a $ 200 (20%); pero al mismo tiempo, él o los empresarios dueños de esta empresa, al hacer sus declaraciones personales de impuestos (Global Complementario o Adicional), la devolución de impuesto también aumenta de $ 170 a $ 200, por lo cual la recaudación tributaria del Fisco no aumenta en nada", agrega.
Fernando San Román lamentó que el gobierno pretenda "engañar" a la gente con estos anuncios, ya que al no recaudar mayores impuestos se sigue perjudicando a las regiones con recortes presupuestarios para financiar la reconstrucción luego del terremoto del 27 de febrero en el sur de Chile.
"La Concertación no tuvo el coraje, en 20 años, de realizar una reforma tributaria para que las empresas que más ganan paguen más. Raro hubiera sido que la derecha, a pesar del desastre del terremoto, se hubiera atrevido a tocar las utilidades de estos grandes grupos económicos. Es lamentable cómo tratan de meterle el dedo en la boca a la gente", concluyó.
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